DO NOT DISTURB

Siento decirlo y perdónenme aquellos que les encante fisgonear, pero hoy me siento incomoda con los ojos fisgones que atacan la intimidad de las personas.

Esa necesidad humana de saber lo que la vecina hace ( hipérbole de la vida misma) no sé qué finalidad tiene, es una pregunta que me hago. Claro está que todos llevamos dentro un pequeño marujilla dentro en ciertas ocasiones…que tire la piedra el que nunca haya mirado hacía una aglomeración de personas o cuando te enteras que fulanito lo ha dejado con menganito. Siempre hay situaciones en las que la curiosidad se subleva en contra tuya y se despierta en ti un Sherlock Holmes sediento de información, pero creo que ahí está la barrera de una maruja con rulos y una persona curiosa.

La curiosidad no es mala, pero cuando sobrepasas esa barrera y las preguntas se convierten en preguntas incomodas…se rompió la intimidad.

Mi intimidad es mía y no me gusta que la invadan (hoy estoy rebelde J) Hay que llamar a la puerta, un simple toc toc puede hacer que todo sea más fácil. Y aunque llames a la puerta, tienes que ser cuidadoso.

Hay tipos y tipos de marujas, algunos (usaré el masculino para no hacer de esto una entrada machistas, aunque he de decir (y eso que soy una chica) que los hombres son más fáciles en éste sentido) simplemente buscan sin una finalidad, otros quieren hurgar para chismorrear después, otros para demostrar que son los que más saben…en definitiva se pueden catalogar en hienas, en leones o en gatitos, que cada uno se incluya donde quiera, si es que eres uno de su especie.

Por favor, abstenganse los que hacen preguntas y preguntas. DO NOT DISTURB!!!